viernes, 4 de mayo de 2012

LA ROCA DE LA CRUZ DEL SUR EN MACHUPIKCHU





No es raro en el Cusco encontrar ciertas piedras monumentales o formaciones rocosas que representaban deidades míticas o seres propios de la cosmovisión inkaica. La mayor parte eran wak’as o adoratorios ancestrales. En casi todos los restos arqueológicos, igualmente, hay piedras que muestran formas o talladuras que no tienen una explicación racional, a la luz del modo actual de pensamiento, y simplemente invitan a la imaginación a desarrollar todo tipo de hipótesis. Tal vez nuestra propia ignorancia no nos permite una lectura verdadera de estas piezas líticas.

Una de ella es la llamada “Piedra de la Cruz del Sur”, en Machupikchu. Se encuentra al costado izquierdo del llamado Templo Principal y ahora, gracias a su popularidad, ha sido acordonada para evitar su deterioro, porque al estar ubicado al paso de los visitantes hacia el Intiwatana, inevitablemente era objeto de pisadas o golpes que podrían dañarla.

Varios investigadores han escrito acerca de ella, James Arévalo fue uno de los primeros, y en su libro “The Awakening of the Puma” (1997) asoció la roca con la constelación de la Cruz del Sur. Su descubrimiento data de 1993 y, aunque ya era muy conocido por arqueólogos y guías de turismo, fue uno de los primeros en publicarlo. Otro tanto hizo el Lic. Cosme Cuba, cuando en 2005 hizo público, en un libro, la foto de la roca describiéndolo como una escultura lítica que señalaba los cuatro puntos cardinales. Casi todas las guías turísticas impresas sobre Machupikchu la detallan como un atractivo dentro del circuito a recorrer en la monumental ciudadela.

Pero, en verdad, representa esta roca a la Cruz del Sur?

Estudiando su forma y luego de hacer mediciones astronómicas se puede afirmar que sí, que guarda alguna probable relación con la pequeña constelación de la Cruz del Sur.

Hace solo unos días (Abril de 2012), el investigador Carl Niemann, de Dresden, Alemania, realizó nuevas mediciones y fotografías que son compartidas en este artículo. Nuestro agradecimiento especial a Carl.

La forma de la roca tallada, que es parte de la roca madre que subyace bajo esta zona, semeja la conformación estelar de la Cruz del Sur. Mide aproximadamente 1.20m de largo por 0.80m de ancho y una altura de 0.70m. La cara superior de la roca tiene una forma diamantada o de rombo, que es la manera cómo el hombre andino reconocía a esta constelación, y aunque la disposición de estrellas no corresponda rigurosamente con la entalladura de la roca pues, el vértice derecho no tiene la variación posicional típica de la estrella delta crucis o brazo derecho de la Cruz del Sur. Las proporciones, igualmente, no son las más exactas; aun así, se asemeja a la menuda constelación austral.

Otro detalle, ya conocido desde hace muchos años, es la orientación de su eje principal; así, la cabeza del rombo lítico apunta hacia el Sur magnético, del mismo modo que el pie lo hace hacia el Norte. Por defecto, las vértices laterales apuntan a los otros dos puntos cardinales.

Queda un detalle no publicado antes por ningún investigador: la inclinación de la roca tallada. La piedra en cuestión tiene su superficie o cara superior visible, una pronunciada elevación hacia el Sur. Esta elevación es de unos 35,5° a 36°. Debido a que su superficie no es totalmente plana, tal vez por la erosión causada por el fenómeno del intemperismo de tantos años, arroja esas dos medidas angulares.

La constelación de la Cruz del Sur, en la actualidad, está a una altura de casi 40° sobre el horizonte ideal (0°). En época de los Inkas esta altura era mayor, unos 4 o 5 grados, debido al movimiento de precesión de la Tierra.

Entonces, la inclinación de la roca nunca pudo apuntar ni siquiera al pie de la Cruz del Sur (Estrella Alfa Crucis o Acrux) sino a un punto más bajo en el cielo. Si imaginamos que tal roca tuvo alguna vez una moldura o artificio metálico sobre ella para que sirva como mesa ceremonial o para poner alguna ofrenda a esta constelación entonces tendría otra connotación que valide su ubicación tal como se ve en la actualidad. Recordemos que el Ushnu del Cusco tenía una cubierta de oro tal como lo refieren los cronistas como Betanzos, Molina,  y otros.

La arqueoastronomía propugna la precisión en las mediciones angulares y de alineamientos en los objetos en estudio, sean estas edificaciones, templos, rocas talladas, etc., para afirmar categóricamente sus vínculos con la astronomía y sus objetos celestes. En este caso, la llamada roca de la Cruz de Sur solo aproxima en altitud pero sin duda, su orientación al Sur magnético es asombrosa.

Y como novedad les diremos que un investigador argentino ha hallado, en los Andes argentinos, una piedra parecida a la de Cruz del Sur de Machupikchu. Esperemos que su publicación llegue pronto al público.

Fotos y mediciones: Carl Niemann.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Erwin - Que buenos sus estudios. Sigo con el estudio de la Sala de los Morteros cuyos morteros tienen orientacion Norte - Sur exacto entre ellos . En Rincon Chico en Argentina hay dos morteros que se estudia segun su orientacion en el Solsticio de Diciembre. Mi padre se publico un ensayo acerca la posibilidad del uso del Torreon en M.P. como gnomon para dar cuenta de los dias importantes Solsticios, Equinoccios y Zenit. Saludos, Ken Kaufman